Una cosa es lo que tú puedes planificar en el día y otra la que el destino te tiene preparado, según como veas las cosas puede ser un pesimista en este sentido o eres de los que adoran que la vida los sorprenda. Esta vieja gorda es del segundo grupo y regreso muy feliz a su casa ese día que fue al mercado a hacer algunas compras. Pensaba gastar un poco de dinero cuando aparece un pervertido y le ofrece sexo por dinero, ella acepta comerse su polla y dejar que le dé una follada a su coño que hace tiempo necesitaba, y volvió casa con más dinero del que salió.