Tu cabeza de alguna forma asocia cosas de una forma de crear una realidad lógica, eso hace que te sea imposible imaginar una rosa comiendo un dinosaurio. De verlo, estarías sorprendido. Lo mismo pasa cuando miras a esta pelirroja delicada que de pronto consigue un pollón muy gordo y se lo mete dentro del culo. Nuestra primera idea es que la va a romper en dos y que jamás podría entrar semejante cosa dentro de su ano, pero es una zorra y se mete cualquier verga que consigue por el coño y por detrás. Es una puta y no hay más explicación, solo disfrútalo.