Las vacaciones son largas y los chicos están solos en casa mientras los padres trabajan. Ellos se aburren mucho pero parece que entre los hermanos han hecho pacto para mantenerse entretenidos. La chica le dijo al chaval que si deja que le chupe la polla, ella se dejara follar el coño. Así que ahora todos los días ella entra a su alcoba para comerse su verga. Luego que se ha dado gusto y ve que la tiene dura, se baja las bragas y deja que se folle su raja un buen rato. De hecho, hasta ella misma se la mete hasta que el jovencito se puede correr.