Ella estaba muy triste porque hace unas horas su novio había terminado con ella. Se sentía una chica horrible porque de camino a casa de su mejor amiga, ningún tío le propuso follar y eso es algo que no pasa todos los días. Entonces ahí fue cuando la otra chica entendió que lo que necesitaba era un poco de atención masculina y la convence de abrirle las piernas al hombre maduro que vive al lado. Era justo lo que necesitaba, una polla dura follando su coño le hizo subir el autoestima muy rápido y ahora ya volvió a ser la misma puta alegre de siempre.