Él siempre supo que ella era una mujer con tendencias sumisas, una rubia joven con buen culo que adora complacer a su hombre, parece que psicológicamente tiene problemas, pero en la vida real eso es una virtud. La única pega es que tiene un coño muy ardiente y le gusta que le den de palmadas antes de follar, pero tampoco es un problema para ponerse a llorar. Porque la zorrita tiene una raja deliciosa y cualquier cosa que haya que hacer para follársela, está justificada. Además hace buenas mamadas de polla y no se cansa nunca de chupar verga hasta que se corren.