Se supone que si te invitan a una casa debes seguir reglas, algunas se escriben en las normas de educación y las otras no están escritas. Básicamente son las mismas que cumple toda hermandad de hombres. Aunque una sagrada es no follarse a la hija de tu amigo. Pero eso es difícil cuando el tío una en su casa una jovencita zorra que está deseosa de comerse tu polla. Además si tiene un coño tan caliente, difícilmente tendrás más amistades que te quieran invitar a su casa pero habrás echando un buen polvo con una putita muy joven.