Su marido la conoció en la calle pero vio algo en ella que no vio en otras mujeres. Una chica sin mucha gracia pero muy complaciente. Bajo autoestima pero además es pelirroja. Tal vez su raza explica todo porque sabemos cómo son las putas de cabello rojo. Así que saco todos sus ahorros del baño y los invirtió en su cuerpo, ahora es una mujer madura con las tetas operadas y muy agradecida con su macho. Se lo demuestra siempre dejando que se folle su coño cuando él quiera. Todos los días se mandan un polvazo en el sofá de la casa y él vive muy feliz con su madura.