La vecina es una jovencita que parece que no entiende bien lo que significa la convivencia. Ella no tiene claro que hay normas que están hechas para que las personas no se maten entre ellas, pero ella insiste en poner la música a todo volumen y a la vez usar unos audífonos para escuchar una música diferente. Es una loca molesta que necesita un poco de disciplina, pero cuando el tío de al lado fue a reclamar, descubrió que la zorrita es un buen polvo. Tuvo que imaginarlo por las ricas que tetas que tiene y ella lo dejo claro dejando que penetrara su coño ardiente.