Él debió saber que algo podía pasar cuando ella insistió que invitara a su mejor amigo para ver los deportes. Lo que es extraño porque a ella no le gustan y además había hecho la promesa a sus padres de no dejar que se pusiera zorra. Pero la hermanita pequeña siempre tiende a salirse con la suya y el chaval se siente obligado a complacerla a escondida de sus padres. Pero ese día se pone tan calentona y cuando esta así solo se calma con una doble penetración. Su hermano y el otro chaval tuvieron que penetrarle el culo y el coño para que ella pudiera estar tranquila.